América vivía a finales del 2011 una de las etapas más inestables de su historia, y tras no lograr la calificación a la Liguilla de la mano de Carlos Reinoso, el dueño Emilio Azcárraga decidió dar las gracias al entonces presidente Michel Bauer y junto al Comité de Futbol de Televisa conformó una nueva estructura directiva de las Águilas.
El jueves 10 de noviembre, hace 5 años, fueron presentados Ricardo Peláez como presidente deportivo y Yon de Luisa como presidente operativo.
El mismo Peláez, en entrevista con RÉCORD, comparte sus experiencias en este lustro al frente de Coapa.
Después de 5 años como presidente deportivo, ¿cuál es tu balance?
Estoy muy contento, yo creo que ha habido congruencia y coherencia en lo que se dijo en aquel momento que llegamos y en lo que ha pasado. El equipo venía de una temporada difícil con 15 puntos y problemas de cociente y hoy somos el primer lugar en ese sentido, hemos conseguido dos títulos de Liga y dos de Concacaf y se habló que antes de los 100 años se fuera el equipo más ganador y hoy lo somos. Han pasado técnicos y todos han dejado algo a la institución. Estoy agradecido con los jugadores que son los que ejecutan en la cancha, pero también con toda la familia de Coapa y la gente que trabaja aquí, en la cocina, oficinas, muchas labores.
¿Ha sido fácil rectificar el rumbo?
No, ha sido un esfuerzo grande de todos y también de las familias que a veces ven sacrificadas sus vacaciones, descansos. Pero son más las alegrías y satisfacciones que los sacrificios. Se ha trabajado fuerte. Quisiera ver una foto mía de cómo estaba hace cinco años y cómo estoy hoy físicamente, debe haber desgaste por supuesto, pero con los títulos que hemos ganado no cambio la alegría por nada y siempre todos juntos trabajando, con humildad, respetando mucho a los rivales.
¿Te ves mucho tiempo más en Coapa?
No lo sé... no vamos a ser eternos, aquí hay ciclos, desgastes, momentos para todos y ahora me tocó a mí; después vendrán otros y trabajarán con su fórmula. La mía me ha dado resultados, lo tengo clarísimo y no es otra más que estar cerca de los jugadores, yo fui jugador y me siento uno de ellos porque estoy muy cerca de ellos, participo, me asesoro y decido con ellos.
¿Te gustaría quedarte mucho tiempo más?
Llevo 5 años, no sé cuánto tiempo más voy a estar aquí, vamos a trabajar el tiempo que sea para seguir consiguiendo cosas importantes y darle la alegría a la gente.
¿Te arrepientes de algo como directivo del América?
No, tengo claro que cuando te tropiezas hay que levantarte rápido y me voy a seguir tropezando, pero también en las buenas hay que saber ganar y eso es muy importante; si sabes ganas sabes perder, nosotros respetamos mucho nuestro trabajo y a los rivales, nunca hemos hablado mal de ellos ni lo haremos.
¿En el aspecto personal y profesional cómo has evolucionado?
Es una constante adaptación al día a día, el haber trabajado en medios de comunicación también algunos años me da a entender muchas cosas, lo que genera América, cuando hay eventos importantes o uno pensaría que se debe hablar de otros temas que están vigentes, se habla y se abre con el América que es un equipo fenómeno. La crítica positiva o negativa también está en nosotros adaptarse y saberla canalizar.
Qué hay que hacer para seguir estando vigentes, que la fórmula continué efectiva... Reinventarse involucra muchas cosas, como persona, directivo, jugador, entrenador, equipo. En el día a día ilusionarse nuevamente, buscar nuevos retos. Si ya lograste un objetivo no te puedes tirar en una zona de confort, hay que seguir trabajando para lograr otro. También reinventarse renovando al equipo, hoy ya le dimos vuelta al plantel. Como directivo tienes que buscar nuevas opciones y jugadores que vengan con esa ilusión, por eso lo de las ‘bombas’ que espera la afición es complicado explicar, yo quiero jugadores ilusionados, ves llegar a un chavo de 23 años como Bruno Valdez y romperse el alma, aguerrido, meter la pierna y salir lesionado.
¿El 26 de mayo de 2013 es el mejor día de tu vida en América?
Ha habido varios, pero quizás sí sea el mejor por cómo se dieron las cosas, si escribes una novela o película no te sale tan perfecta. Momentos que también viví con mi familia porque ahí estaban mis hijos y mi esposa.
