Llegamos en el 2012, no somos de familia americanista, pero una cosa teníamos claro: estábamos llegando al más grande. Estar en el América representa estar en la silla más odiada y peleada de todos los equipos. Hay que dejar algo bien claro, en el futbol mexicano son 17 equipos y el América.
Ser americanista es no conformarte con nada porque el América tiene que ganar, golear y gustar. Y lo entendimos como familia o por lo menos Don chingón nos lo supo transmitir muy bien. Entendimos que estar en el Nido era vivir en el ojo del huracán 24/7. Fue difícil, nunca habíamos estado en un equipo tan mediático.
Hoy sabemos y entendemos que el 'Ame' tiene que quedar Campeón o fue un fracaso el torneo, que tienes que debutar a más de cinco o tu cantera no está funcionando, que si llevas dos partidos perdidos al hilo ya hay crisis y que si hay un grito en la cancha entre jugadores, el vestidor seguro ya está roto, por que eso es el América. Son cosas que estando fuera aunque te las cuenten no las entiendes, por que tienes que estar ahí, para saber qué es ser amado y odiado.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: COMISIÓN DISCIPLINARIA ABRE PROCESO EN CONTRA DEL PIOJO HERRERA
No podría decir o enumerar con exactitud todo lo que Miguel 'El Piojo' Herrera le ha dado al americanismo. Palpables podrían ser dos títulos la 11 y la 13, muchísimos Clásicos ganados, uno que otro canterano en Europa, hoy un equipo con muchos huevos y corazón que pelea los 90 minutos, sienten la camiseta, son algunas de las cosas que me vienen a la cabeza, pero de algo sí estoy segura, son innumerables las cosas, que el América y el Americanismo le ha regalado en 200 partidos oficiales a Miguel Ernesto Herrera Aguirre.
*Este texto fue elaborado por Mishelle Herrera para su columna invitada del martes 5 de marzo del 2019 en RÉCORD.