No todo fueron buenos recuerdos en el partido de Leyendas del Clásico Nacional. Y es que después de vivir un partido intenso en el primer tiempo, los ánimos se enfriaron después de sufrir un descanso de más de una hora.
Distintos rumores hablaban sobre una posible protesta de los equipos al no haber recibido su pago. La afición desesperada por no ver a los jugadores regresar al campo, comenzaron a silbar y muchos de ellos abandonaron el estadio.
Finalmente, con un tiempo récord de una hora y diez minutos, los futbolistas regresaron al terreno de juego, inundados de insultos de los pocos asistentes que decidieron permanecer en el estadio Andrés Quintana Roo.