LUIS SALAZAR
Javier ';Chuletita'; Orozco tomó el balón, lo acomodó en el manchón de penal, asumió su rol de líder, y tiró fuerte, a la izquierda, para meter el gol de Cruz Azul que le dio la victoria en la Copa MX ante el Altamira.
La Máquina ganó 1-0 un juego complicado, de visitante, ante un rival que disputa en todo el momento el balón; además se llevó los tres puntos y el liderato del grupo 2. Pero perdió, por lesión, a un de los jugadores más importantes del equipo: Julio César Domínguez.
Los juegos ríspidos, duros, con gran intensidad de la Copa MX le están cobrando la factura a Cruz Azul. En el primer partido de este torneo ante el Neza hace dos semanas se lesionó Christian Giménez y todavía sigue en rehabilitación. Este martes, el Cata tuvo una lesión en la rodilla izquierda.
En el primer tiempo del partido, Cruz Azul tuvo poco el balón porque el Altamira no se los prestó. La Máquina tuvo que defenderse de los ataques del rival que encaró el juego con gran intensidad e ímpetu por ganar. Los Estudiantes tuvieron un par de llegadas pero perdonaron.
Para la segunda parte, Cruz Azul salió decidido a ir por el triunfo. Controló el balón y buscó crear oportunidades de peligro. Así, al 67'; Raúl Vidal, joven canterano de La Máquina, fue jalado en el área tras un tiro de esquina y el árbitro marcó el penal.
Orozco ejerció su rol de capitán del equipo y decidió cobrar el penal. Tiró a la izquierda del portero, fuerte, y metió el gol. Altamira intentó empatar pero tuvo más ímpetu que futbol lo que facilitó la labor a la defensiva celeste.
Cruz Azul hizo respetar su grandeza y con la victoria de ayer es el líder de su grupo en la Copa. Aunque es un torneo que no tiene la máxima importancia para el club celeste, el prestigio no se debe perder ante ningún rival, aunque para lograrlo tenga que lesionarse alguno de sus jugadores.
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