AGENCIAS
Consciente del rol de favorito que tiene Cruz Azul en cualquier competencia, el delantero Omar Bravo juzgó que siempre habrá presión si los resultados positivos no llegan, pero confió en que pronto el equipo dará de qué hablar bajo la tutela del técnico Guillermo Vázquez.
Tras rescatar cinco de nueve puntos posibles en el Torneo Apertura 2012, aunque con dos empates en el estadio Azul, ambos sin anotaciones ante Morelia en la fecha uno y Guadalajara en la tres, el inicio de La Máquina no es del todo lo que quiere su afición.
"Lo ideal sería que el equipo siempre ganara, pero hay que tomar en cuenta otros puntos como que hubo un cambio de entrenador (con la llegada de Guillermo Vázquez), es un proceso que nosotros lo vamos asimilando. Sabemos que cada jornada el equipo está en la mira, pero no me queda duda de que con el tiempo este equipo va a dar de qué hablar con el trabajo de Memo”, comentó.
Admitió que el plantel sabe el renombre de la institución donde está, pero pidió un poco de paciencia para que empiecen a llegar los resultados positivos, en particular como anfitriones en el estadio Azul.
"Un técnico siempre requiere de un año o más para reflejar su trabajo, pero eso no quita que sabemos que estamos en dos torneos donde a este equipo siempre se le exige ser protagonista, jugar bien, hay muchos aficionados que nos quieren ver ganar siempre y nosotros lo tenemos mucho en cuenta también”, indicó Bravo.
De cara a enfrentar al Puebla en la Jornada 4 en el estadio Cuauhtémoc, donde en sus ocho visitas recientes han rescatado sólo cuatro empates (no gana desde el Apertura 2002, 2-1), el artillero no se presiona por dicha situación.
"Son estadísticas, pero el futbol es impredecible, puede pasar cualquier cosa, siempre deseamos que la suerte esté de nuestro lado con trabajo, sabemos que no hay otra fórmula. Debemos ir con esa convicción a Puebla, de traernos los tres puntos, de jugar bien también y hacer un partido agradable”.
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