Chivas, un año en picada

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| 24 Ago, 2012

GIBRÁN ARAIGE

Bastaron 12 meses para que un equipo que tenía dominado un estilo y aspiraba a los primeros puestos, como Chivas, se fuera a pique, y para que las Águilas resurgieran de sus cenizas para volver a ser un animador.

Hoy, el Guadalajara no logra salir de la crisis deportiva, sólo ha marcado tres goles en cinco juegos, suma cinco puntos y ocupa el lugar 13 de la tabla.

Hace un año, el equipo entonces dirigido por José Luis Real tenía 10 puntos luego de cinco jornadas, uno menos que el líder Pumas, había anotado el doble de goles que tienen hoy y apenas había recibido dos. Ese torneo terminó como líder general.

América, en cambio, se encuentra en franco ascenso, ya es cuarto en la tabla general, con nueve puntos, ha marcado 11 goles y parece que entregará mejores cuentas.

Pero en el Apertura 2011, tras cinco jornadas, las Águilas se encontraban en el lugar 12 de la tabla general con cinco puntos, había anotado la misma cantidad de goles que tenía en contra, seis, y Carlos Reinoso vivía sus últimos días como técnico americanista.

Las Águilas terminaron en el penúltimo lugar de la tabla en el Apertura 2011.

Justamente en esa campaña los altos mandos de ambos clubes tomaron decisiones que afectaron el futuro. Las Águilas destituyeron a Michel Bauer de la presidencia del club, Zague lo sustituyó y terminaron por dejar todo en manos de Ricardo Peláez.

También cambiaron en la dirección técnica. Se fue Reinoso para dejar su lugar a Alfredo Tena; a fin de cuentas, en la reestructuración terminaron por elegir a Miguel Herrera, quien ha entregado buenas cuentas.

En cambio Jorge Vergara optó por cesar al ‘Güero’ Real y nombrar a Fernando Quirarte como técnico. Aunque el Sheriff logró dejar a Chivas en el liderato general, el rendimiento del equipo fue a pique y empezó a caer en una crisis de resultados.

Ya en 2012 llegó Ignacio Ambriz en lugar de Quirarte; Nacho también se fue, ya que Vergara recurrió al holandés Johan Cruyff para cederle el control total de lo deportivo.

El resto de la historia se conoce: el Rebañó ligó 10 derrotas consecutivas, transcurrieron 13 juegos sin conocer la victoria, John van’t Schip tomó las riendas y no ha logrado hacer que el equipo reaccione, mientras que América promete buenas cuentas.

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