EDUARDO SOLÍS
A pesar de la diferencia en la tabla general, que ponía al de casa como amplio favorito, una intensa lluvia se encargó de quitarle las ‘ventajas’ a Jaguares y Atlas aprovechó para intentar sorprenderlo, en un juego que por momentos se volvió tedioso en el medio campo, con las acostumbradas entradas arriesgadas propiciadas por el terreno de juego.
Fueron algunas jugadas propiciadas por errores del equipo de casa que pusieron en predicamentos su portería; tuvo que intervenir Edgar Hernández en una de ellas para evitar el desaguisado y fue ahí donde Jaguares despertó para buscar imponer condiciones.
Jackson Martínez, que regresó a la titularidad en este cotejo, fue la punta de lanza en ataque, luego de bajar por un balón y comenzar la jugada que, luego de pasar por Jorge Rodríguez, llegó caprichosa a los pies de Luis Gabriel Rey, que ya se había perdido una clara y que no hizo más que empujar el balón, justo cuando parecía que habían pactado la igualada al medio tiempo.
Jaguares fue por más y comenzó a tener opciones, obligando al Atlas a olvidar sus intenciones ofensivas y comenzar a detener los embates; tuvo que ser el silbatazo del árbitro el que detuvo los constantes ataques de Jaguares.
La única forma de meterse en el juego para el Atlas era pegarle en lo emocional a los de casa y así lo hicieron en la reanudación, cuando Arreola cobró un tiro libre, aprovechó que la barrera saltó y sorprendió a Edgar Hernández. EL empate le pegó duro a Jaguares, que perdió la brújula y Atlas estuvo muy cerca de ponerse arriba en el marcador sin mucha fortuna.
El de casa se recuperó y volvió a buscar el gol, José Guadalupe Cruz también puso su grano de arena al colocar a Arizala para tener al tridente colombiano, los minutos transcurrían.
Juan Carlos Chávez envió a la cancha a Antonio Briseño, el debut del campeón mundial para cerrar el empate y tratar de atrapar a Jaguares en un latigazo o un error.
A Juan Carlos Chávez le funcionaron los movimientos y supo contrarrestar los movimientos, llegó al silbatazo y los visitantes pudieron un un Jaguares de Chiapas bipolar, con un primer tiempo dominante, de líder general y una parte complementaria de ese viejo Jaguares al que traicionan las emociones.