JONATAN PEÑA
La Comisión Disciplinaria ratificó el juego de suspensión a Paul Aguilar a pesar de la protesta de la directiva americanista y a su arribo a Monterrey, el técnico de las Águilas, Miguel Herrera, se dijo sorprendido por la determinación luego de que con Ángel Reyna no sucedió lo mismo; sin embargo, optó por ser cauto en sus declaraciones por órdenes de la directiva.
"Sí me sorprende (la decisión), pero eso lo va a atender y contestar el señor Ricardo Peláez, que es el presidente deportivo, a nosotros nos pidieron que no habláramos de eso", refirió el Piojo.
El estratega azulcrema confía en Óscar Rojas y Matías Vuoso, quienes tomarán los lugares de Aguilar y Bermúdez, este último por lesión.
"Sabemos que tenemos otros jugadores que vienen a ser relevos y sabemos también que perdemos a un jugador importante, pero hay que seguir adelante", indicó.
Cuestionado si sigue pensando que el Tecnológico no pesa, apuntó:
"Los estadios no pesan, pesa la afición, impone y ésta (de Monterrey) ya lo dije miles de veces que así es".
Sin embargo, refirió que el público no juega y al final será una batalla pareja y en igualdad de circunstancias dentro del campo.
"El partido es once contra once dentro de la cancha, la gente va a hacer su papel porque siempre lo ha hecho, es una extraordinaria afición, la espero tan entregada como siempre, con una gran disposición y espíritu de aliento hacia sus colores, así es la gente aquí, llevan tatuado el escudo del equipo, pero somos once contra once", enfatizó.
Sobre el clima hostil que seguramente le hará sentir el público regio por su pasado rayado, manifestó: "Con mucho respeto lo voy a tomar, hoy no quiero que me apoyen, ya que venimos con la idea de ganarle a su equipo".