Zinedine Zidane, técnico del Real Madrid, huyó del papel de favorito que se concede a su equipo en el Clásico por los seis puntos de ventaja sobre el Barcelona y aseguró que espera un partido "diferente al año pasado", cuando conquistó el Camp Nou al ir "con el culo apretado".
"Mañana (sábado) va a ser un partido completamente diferente al del año pasado que íbamos con el culo apretado. Tenemos que tener la misma cosa en la cabeza porque son muy buenos pensando de esta manera, pero va a ser un partido distinto. Quiero que estemos preparados igual que el año pasado pero como lo estamos haciendo últimamente y ver un buen partido", manifestó en rueda de prensa.
Zidane espera un choque "complicado" y "muy duro" ante "un gran rival", pero aseguró que sus jugadores están "listos" para volver a conquistar el Camp Nou, pero sin sentirse favoritos.
"La gente quiere ver un buen partido de futbol y lo más importante es estar concentrados en nuestro trabajo. Para nada somos favoritos, no existe favorito en este Clásico. Es 50 a 50 como siempre. No me gusta lo que están diciendo alrededor", advirtió el técnico galo.