Por primera vez desde el 2013 habrá un campeón de competencia europea que no sea de España. Con la Final de este miércoles en Estocolmo entre Ajax y Manchester United se pondrá fin a la hegemonía de nueve títulos seguidos que fueron levantados por equipos de un mismo país.
Barcelona, Real Madrid y Sevilla se habían encargado de acaparar en los últimos años los trofeos de la Europa League, Champions League y Supercopa de Europa.
En las últimas temporadas, la Liga española se ha posicionado como la más exitosa del continente, prueba de ello es que el Sevilla ganó la Europa League tres veces seguidas, además de que el Madrid ha ganado dos Champions en tres años y la otra fue ganada por el Barcelona. Incluso para el próximo 3 de junio, el cuadro merengue podría conquistar otra Orejona.
Además, el ganador acabará con el dominio del Sevilla, equipo que ha ganado tres títulos de Europa League.
El último club no español que ganó una competición internacional fue el Bayern Munich, que obtuvo la Supercopa de Europa 2013 y el Mundial de Clubes, título que también acaparan los clubes españoles, al ganar las últimas tres ediciones (Real Madrid, 2014; Barcelona, 2015 y Real Madrid, 2016).
En la Final de Estocolmo no sólo se pelearán por saber quién es el equipo que rompa la hegemonía española, sino también un lugar en la próxima Champions, situación de la que ambos clubes están conscientes.
“Es un partido fundamental para nosotros, nuestra ambición es jugar la Champions League la próxima temporada. Es también un título europeo, uno importante. Ha pasado mucho tiempo desde que el United ganó un título europeo y la Europa League es la única competición que el club no ha ganado todavía. Todo esto hace que sea un partido muy importante para nosotros, pero lo mismo es para el Ajax”, analizó Ander Herrera, mediocampista del Manchester United.
“La gente sabrá que el Ajax sigue siendo un equipo importante, que el Ajax tiene cosas buenas, jugadores jóvenes y que sigue entrenando muy bien a estos futbolistas. Jugamos como lo hacíamos en los años 70 y 90”, manifestó Peter Bosz, estratega del cuadro holandés, sobre el partido y de la necesidad del club de ganar un título.