El Liverpool sumó su primera victoria de la temporada tras derrotar en Anfield al Crystal Palace de Frank de Boer 1-0, gracias a un solitario tanto del senegalés Sadio Mané en la recta final del partido.
A los dirigidos por Jürgen Klopp les costó más de lo esperado hacer daño a unas defensivas Águilas, que se plantaron con un 5-3-2, sin su máxima estrella, el marfileño Wilfred Zaha, y tras haber sido goleado en casa en la jornada inaugural de la Premier por 0-3 frente a un recién ascendido como el Huddersfield Town.
No fue hasta la segunda mitad, coincidiendo con la entrada de Mohamed Salah y del joven Dominic Solanke, que lograron perforar la meta defendida por Wayne Hennessey.
A falta de poco más de 15 minutos para el final, el balón le quedó franco a Mané después de una serie de rechazos para perforar la portería rival y así celebrar su segundo gol de la campaña.