En tan solo 10 años el Barcelona conquistó cuatro de las cinco Champions League que presume en su vitrina, y tuvo que vencer al Tetracampeón de Italia para que esto fuera posible; le ganó 1-3 a la Juventus.
Fue en el Estadio Olímpico de Berlín donde la historia citó al conjunto catalán para saldar cuentas, ahí el Barça logró levantar su quinta Orejona y de paso conquistar el segundo Triplete de su historia y de la historia del futbol, pues ningún otro equipo antes lo había logrado.
Para lograr la osadía el equipo dirigido por Luis Enrique fue primero líder del Grupo F con 15 unidades, ganando cinco de sus seis encuentros, donde la única derrota fue en la Ida ante el París Saint Germain, pues el Apoel y el Ajax fueron presas fáciles para el equipo español.
Por si quedaba alguna duda en el funcionamiento blaugrana, el Barça tuvo como prueba en los Octavos de Final al entonces Campeón de Inglaterra, el Manchester City, al que derrotó 1-2 en la Ida y 1-0 en la Vuelta.
Para los Cuartos de Final el Barça tuvo revancha frente al PSG y no hizo más que evidenciar que lo ocurrido en el Parque de los Príncipes fue un descuido, pues en la Ida se impuso 1-3 y en la Vuelta 2-0, así logró llegar a la antesala de la Gran Final.
Entonces, el sorteo se encargó de ponerle la que fue su más difícil prueba: el Bayern Munich, Campeón de Alemania y además con Josep Guardiola al frente, el legendario entrenador que conquistó todo con los catalanes. El cuadro bávaro tuvo bajas importantes como Franck Ribery y Arjen Robben; el Barcelona llegó completo y motivado, pues desde la Ida firmó la eliminación de la Bestia Negra'. En la Ida se impuso 3-0 y en la Vuelta cayó 3-2.
Finalmente fue la Juventus, la sorpresa del torneo, que logró dejar en el camino al Real Madrid, la Vecchia Signora le jugó de tú a tú al Barcelona y aunque el cuadro español empezó ganando, la Juve logró el empate, pero la gloria solo esperaba por el Barça por lo que al minuto 78' Suárez puso orden y marcó el 1-2, luego Neymar selló la cuenta al 96' con el 1-3 definitivo que le dio a los catalanes el pase único a la inmortalidad.