El Barcelona desea dar un golpe de autoridad en la Liga y consolidar la reacción que tuvo hace unos días en Riazor, donde ganó 0-8 después de semanas en caída libre, y para ello se le presenta el desafío del Sporting, que aún se encuentra en el pozo a pesar de la rebeldía que ha mostrado en los últimos partidos contra un destino fatal.
La victoria por 2-1 contra el Sevilla y el empate anterior frente a Las Palmas han sido insuficientes para el Sporting, que no ha podido salir del pozo del descenso pese a que se encuentra a las puertas de evitarlo. Ahora se le presenta una contienda ardua si el Barça es capaz de mantener un mínimo acierto en la meta rival.
El equipo de Luis Enrique, aún en la cima del campeonato, lidera el torneo gracias a la ventaja adquirida por los goles a favor en los dos partidos contra el Atlético de Madrid.
Eso le permite seguir dependiendo de sí mismo, al margen de lo que hagan sus rivales. Cualquier nuevo despiste del Barcelona, tras perder once puntos seguidos en cuatro partidos, puede descabalgarle del liderato.
El 0-8 en Riazor ha rearmando al cuadro azulgrana, que ya dio alguna muestra de mejoría en el anterior partido frente al Valencia a pesar de que el resultado no acompañó en el Camp Nou (1-2). El más beneficiado de la pasada Jornada fue su tridente goleador, con Luis Suárez a la cabeza. El uruguayo firmó un partido memorable en Galicia, con cuatro tantos y tres asistencias.