El Villarreal sigue sin ganar a domicilio en LaLiga después de empatar ante el Celta de Vigo de Néstor Araujo, en un partido en el que disfrutó de numerosas ocasiones para “matar” a los de Eduardo Coudet pero acabó sufriendo para conservar el punto.
Emery planteó un duelo físico, situando a Iborra como pivote defensivo y a Rubén Peña y Alberto Moreno por delante de los laterales. Y esa apuesta neutralizó al Celta, sin ideas en ataque, con Aspas y Denis Suárez desaparecidos.
Sus únicas aproximaciones con peligro en el primer tiempo llegaron con un disparo de Nolito, al que respondió bien Rulli, y un centro muy cerrado de Javi Galán que se estrelló en el larguero. El Celta regaló los primeros 45 minutos, y llegó vivo al descanso porque el Villarreal le perdonó la vida.
Y es que, sin hacer nada del otro mundo, la superioridad amarilla fue brutal. Se adelantó después de un monumental error del portero Matías Dituro, que aprovechó Parejo para asistir a Alberto Moreno. Ese tanto mató a los celestes, que vieron como, a pesar de su fallo, el meta argentino fue el mejor de los suyos, con dos paradas salvadoras ante Trigueros y Dia en la recta final del primer tiempo.
Coudet, muy enfadado, movió ficha en el descanso. Santi Mina y Murillo fueron los sacrificados para dar paso a Galhardo y Araujo. El Celta se adueñó del balón, pero otro error, esta vez de Fran Beltrán al intentar evitar ceder un córner, obligó a Dituro a lucirse con una gran estirada al disparo de Trigueros.
El Celta subió su línea de presión, volcó su juego hacia la banda izquierda de Javi Galán y amenazó con un cabezazo de Thiago Galhardo (min.62) y un disparo de Araujo (min.66). El Villarreal, pese a que Emery refrescó su once, renunció al balón, y su rival lo golpeó después de que Rulli despejara mal un disparo de Beltrán, facilitando el gol de Brais Méndez.
Había perdonado el equipo castellonense, y en un minuto el Celta casi voltea el marcador con un disparo cruzado de Iago Aspas, tras una magistral asistencia de Galhardo, que se marchó rozando el poste.
Y no fue la última porque Denis Suárez, muy forzado, erró a puerta vacía en una acción invalidada por fuera de juego que podría revisar el VAR porque parecía que Galhardo arrancó en posición correcta.