El hasta hace unos meses equipo más laureado de la Ligue 1, el Saint-Étienne, con 10 títulos de Liga francesa, empatado esta temporada por el París Saint-Germain, perdió la categoría por cuarta ocasión en su historia.
Los Verdes tuvieron que jugar la promoción para evitar el descenso, al finalizar en la posición 18 de la Ligue 1, ante el Auxerre, tercero en la Ligue 2, en un par de partidos, a Ida y Vuelta, de los cuales, el definitivo se jugó en la cancha del Saint-Étienne.
Con mayor acierto en el lanzamiento de penaltis que deshizo el empate a un gol con el que se cerró el marcador, el Auxerre logró el ascenso a la Ligue 1 y envió al Saint-Étienne a la Ligue 2. Esto provocó una fuerte decepción entre los aficionados albiverdes que invadieron la cancha tras el descenso de su escuadra.
Los aficionados lanzaron bengalas a los futbolistas de los dos equipos, y después a la tribuna donde se encontraba el palco presidencial. Los primeros reportes indican que entre los lesionados se encuentra el portero del Auxerre, Donovan Leon. Los cientos de seguidores fueron dispersados por gases lacrimógenos lanzados por la policía, de acuerdo con L’Equipe.
Tal y como sucedió en el encuentro de Ida el duelo de vuelta disputado en el Estadio Geoffroy Guichard terminó con empate a un gol. Fue el Auxerre el que tomó ventaja en el minuto 51 gracias a Hamza Sakhi, de cabeza. Y a un cuarto de hora del final, Mahdi Camara consiguió el empate que permaneció hasta el final.
El argelino Ryad Boudebouz falló el primer lanzamiento del cuadro local en la tanda de penaltis. El Auxerre de Jean Marc Furlan anotó todos.