El partido entre Niza y Olympique de Marsella, por la tercera Jornada de la Ligue 1, se suspendió en el Allianz Arena cuando aficionados radicales del equipo local ingresaron al terreno de juego.
El encuentro se detuvo en el minuto 74 cuando seguidores del Niza saltaron al terreno de juego para agredir a los jugadores del Marsella después de que Dimitri Payet fuera golpeado por una botella que devolvió airadamente a la grada.
Durante la confusión que se vivía en la cancha, el técnico del OM, Jorge Sampaoli, se encaró con algunos aficionados y tuvo que ser controlado por su cuerpo técnico.
Sampaoli trató de ser detenido por sus auxiliares y jugadores, pero provocó otro conato de bronca cerca de las bancas, hasta que jugadores y cuerpo técnico fueron ingresados a los vestidores para calmar la situación.
Después, en los vestuarios y con los ánimos sosegados, se decidió reanudar el partido, a lo que el Marsella se opuso. El árbitro y los jugadores locales saltaron al campo, pero los visitantes no comparecieron y el choque se suspendió.