La polémica respecto a la paridad salarial la selección varonil de los Estados Unidos y el cuadro femenil ha vuelto a sonar en el gremio futbolístico norteamericano. Los futbolistas del equipo masculino dieron respaldo a las exigencias del equipo hermano mediante la Asociación de Jugadores, dando una fuerte crítica a la Federación, exhibiendo una "narrativa falsa" a la espera de que ésta tome acciones lo más pronto posible.
"La Federación ha trabajado muy duro para vender una narrativa falsa al público. Han estado usando esta narrativa falsa como arma contra miembros actuales y anteriores del equipo femenil (…) Se les debe pagar significativamente más que nuestro convenio recientemente vencido. Las mujeres deberían al menos triplicar lo que valía nuestro acuerdo anterior".
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"Esas comparaciones son las que dejan en claro que la Federación no tenía intención de compensar de forma justa a las mujeres (…) Durante más de 20 años, la Federación se ha resistido a cualquier concepto de igualdad salarial o equidad económica básica para las jugadoras del USWNT".
El tema en la selección femenil tomó fuerza cuando se ganó el campeonato mundial en 2019, siendo las protagonistas Megan Rapinoe y Alex Morgan al alzar la voz y exigir la igualdad salarial antes prometida.