Sebastián Sosa, portero uruguayo, pagó una fianza de 50 millones de pesos argentinos, 58 mil 307 dólares, y quedó en libertad condicional hasta que se celebre el juicio por el presunto abuso sexual cometido el 3 de marzo por cuatro futbolistas de Vélez Sarsfield.
El guardameta de 37 años, será juzgado como partícipe secundario, motivo por el cual podrá regresar a su domicilio en Buenos Aires tras pagar su caución, aunque tiene prohibido abandonar el país y deberá presentarse cada 15 días en una dependencia policial.
Asimismo, los otros tres futbolistas encausados, el defensa Braian Cufré, el centrocampista paraguayo José Florentín y el joven delantero Abiel Osorio, permanecerán bajo arresto domiciliario en la localidad norteña de Tucumán, donde se registraron los hechos y donde tendrá lugar el juicio, por un plazo de 90 días hasta el comienzo de este.
Además, tendrán que abonar un alquiler para poseer una residencia en la región, y los tres deberán usar una tobillera eléctrica y pagar una indemnización ecuánime a la del arquero, de cauerdo al medio local La Gaceta.