El Manchester United firmó la sentencia de Ole Gunnar Solskjaer con una sonrojante nueva derrota, esta vez en casa del Watford (4-1), en la que terminó con diez jugadores por expulsión de Harry Maguire.
Los 'Diablos Rojos' tuvieron una primera parte para olvidar contra el Watford, que dilapidó sus opciones. Y eso que David de Gea, que se convirtió este sábado en el jugador español con más partidos en la Premier League, atajó un penalti a Ismail Sarr a los once minutos. Lo paró, el VAR mandó repetirlo y lo volvió a parar.
Pero el aviso no fue suficiente para un United que recibió dos goles antes del descanso. Primero Joshua King desde el área pequeña y luego el propio Sarr con un disparo cruzado.
Solskjaer estaba fuera y recurrió al que nunca recurre. A un Donny Van de Beek que salió desde el banquillo y recortó distancia aprovechando una asistencia de Cristiano Ronaldo.
El portugués, una vez más, pudo cambiar el signo del encuentro y salvar la cabeza de su entrenador, pero, con todo a favor en un mano a mano y con 2-1 en el marcador, Ben Foster le hizo un paradón.
Para hacerlo más complicado, Harry Maguire recibió dos amarillas en siete minutos, la segunda especialmente infantil al intentar regatear a un jugador del Watford, perder la pelota y tener que derribarle, y se marchó, con veinte minutos por jugarse, a los vestuarios.
Pese a estar con uno menos, el United tuvo ocasiones para empatar. Cristiano erró un disparo con poco ángulo y un cabezazo en el área, mientras que Bruno Fernandes desperdició un disparo solo desde la frontal.
En el tiempo añadido, cuando parecía que nada podía ir a peor para el United, Joao Pedro hizo el 3-1 en el 93 y Emmanuel Dennis el 4-1 con el tiempo prácticamente cumplido.
Esta derrota, la segunda seguida para el United tras caer en el derbi de Manchester antes del parón internacional, provoca que solo haya ganado uno de sus últimos cuatro partidos y que, ahora mismo, en la Premier, marche séptimo, a cinco puntos de los puestos de 'Champions' y con varios equipos por jugar.