El entrenador de Lyon, Paulo Fonseca, ha sido suspendido por nueve meses por increpar agresivamente al árbitro en un partido de la Ligue 1.
Fonseca, además de no estar en el banquillo, tampoco podrá acceder al vestuario y verse con los jugadores durante los partidos hasta el 15 de septiembre, según un fallo disciplinario de la liga francesa emitido el miércoles.
La suspensión se aplica únicamente a los partidos nacionales y permitió a Fonseca trabajar este jueves en la Europa League organizada por la UEFA. Lyon se medirá contra el club rumano FCSB en los Octavos de Final.
Fonseca encaró furioso al árbitro Benoît Millot por un posible penal para Brest en el tiempo de descuento cuando Lyon ganaba 2-1.
Después de ser amonestado, Fonseca se acercó al árbitro y se inclinó muy cerca de su cara antes de ser apartado por Corentin Tolisso, capitán de Lyon. Fonseca intentó increpar al árbitro una segunda vez y fue contenido por un par de sus jugadores.

Lyon declaró el miércoles que lamenta que Fonseca haya sido juzgado por una reacción emocional y que no tuvo la intención de atacar físicamente al árbitro. El club está considerando apelar y destacó el contexto de la crítica al arbitraje en el futbol francés.
"El club deplora que su entrenador no haya sido juzgado solo por sus acciones, una reacción emocional sin ninguna intención clara de atacar físicamente al árbitro", dijo Lyon. "(El castigo) parece estar dictado por un contexto dañino que afecta al arbitraje francés".