Desde la banca, la Final de la DFB-Pokal fue contrastante, por un lado un técnico respetado como Jupp Heynckes terminó esta etapa con derrota, del otro, un joven Niko Kovac consiguió uno de sus logros más importantes no sin antes disculparse con su colega.
"Me felicitó y le dije: Jupp, de veras lo siento, pero así es el deporte", expresó Kovac a la televisión alemana aunque reconoció como merecida su victoria frente a el Campeón de la Bundesliga.
"Éramos David y ellos eran Goliath. Solo podríamos hacerlo colectivamente. Cuando nos unimos podemos lograr todo. Queríamos jugar transiciones agresivas, compactas y bien jugadas. Creo que la victoria no es inmerecida", añadió el croata.
Heynckes aceptó su derrota, incluso evitó entrar en polémicas por el arbitraje y aunque compartió su punto de vista, respetó la decisión y consideró que la falta de un buen accionar en su equipo influyó más en el resultado.
"Es una despedida normal, en el deporte hay derrotas y victorias y hoy tuvimos una derrota que hubiera sido evitable", mencionó el estratega alemán.
"Nunca en mi carrera ha hablado de un árbitro al final del partido. Sí, si lo veo fue penalti. Pero creo que nosotros habíamos debido evitar la derrota y que tuvimos posibilidades", expresó el entrenador.