Dos goles del belga Romelu Lukaku, el segundo en el tiempo añadido y de penalti, proporcionaron el triunfo en Bolonia al Inter Milán (1-2), que acentúa su presión al líder, Juventus, obligado a ganar en el derbi turinés.
El cuadro de Antonio Conte, rival del Barcelona en la Liga de Campeones, sufrió para salir con los tres puntos del estadio Renato Dall'Ara. Al final, el empuje, la ambición y el acierto proporcionaron a los visitantes el segundo triunfo seguido después del tropiezo frente Parma hace dos jornadas.
El Inter, que el martes se enfrentará al Borussia Dortmund en la competición europea, tuvo que remontar en la media hora final porque en el minuto 59 un disparo desde fuera del área de Roberto Soriano, que recibió un balón del sueco Mattias Svanberg superó al meta Samir Handanovic, que pudo hacer algo más en su estirada.
Conte movió el banquillo. El uruguayo Matias Vecino sustituyó a Roberto Gagliardini en el 72 y Antonio Candreva a Cristiano Braghi dos después. A continuación llegó el empate.
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El oportunismo de Lukaku fue evidente. Recogió un rechace del meta Lukasz Skorupski después de un barullo dentro del área, para llevar la pelota a la red.
Y cuando el choque estaba abocado al empate, una falta cometida por Ricardo Orsolini al argentino Lautaro Martínez en el tiempo añadido fue sancionada con penalti. Romelu Lukaku no falló y dio el triunfo al Inter, que prolongó su carrera por el liderato de la Serie A.
