Las ganas de volver a la cancha están haciendo que Ivan Klasnic se plantee jugar nuevamente como profesional, con todo y que apenas se recupera de su tercer trasplante de riñón.
“Tras el último trasplante de riñón he recibido una vez más una oferta como jugador, quizá sea ésta una opción para mí. Tendría aún tiempo hasta el verano para volver a estar en forma”, declaró el croata de 37 años al diario regional alemán Weser-Kurier.
El delantero, que jugó casi toda su carrera en el Werder Bremen, superó con éxito el pasado mes de octubre su tercera intervención.
Klasnic confiesa que le gustaría disputar un posible partido de despedida en el estadio del Werder Bremen, donde jugó del 2001 a 2008 y con el cual ganó el doblete de Liga y Copa en 2004. Después podría imaginarse tener un trabajo fuera del campo.
Todo comenzó en noviembre de 2005, cuando en una operación de apéndice salieron a la luz valores renales malos. En 2007, el delantero tuvo que ser operado para trasplantarle el riñón de su madre. Sin embargo, su cuerpo lo rechazó y su padre le donó el suyo, pero tampoco funcionó como debería. Esto le obligó a acudir tres veces por semana a un hospital en Hamburgo para someterse a diálisis hasta que recibió finalmente un nuevo riñón.
Antes de su enfermedad, el delantero era un habitual con la selección balcánica, sumaba 41 partidos, en donde había marcado 12 anotaciones. En su paso con el combinado, entre 2004 y 2011, jugó las Eurocopas de 2004 y 2008 y el Mundial de 2006.