La euforia por el encuentro histórico entre Boca Juniors y River Plate llegó a México, y como era de esperarse, la Condesa se convirtió en un mini epicentro de la Gran Final .
Curiosamente, un grupo de aficionados de River se reunieron en un restaurante uruguayo que sirve platillos típicos para presenciar la “Final del mundo” cómo fue denominda en Argentina .
Durante 90 minutos, los 30 hinchas río platenses vivieron el encuentro definitivo con los nervios a todo lo que da.
A pesar de que no se llevaron el triunfo, la hinchada millonaria cantó y alentó a su equipo en todo momento, contagiando a los comensales mexicanos que se encontraban en el lugar.
Al final del encuentro, mexicanos y argentinos se fundieron en abrazos y dejarán el resto de las emociones para la Vuelta del próximo sábado