Hace nueve años el Chelsea logró su único título de Champions League pero ahora las esperanzas revivieron para los ingleses y las condiciones parecen conjugarse para que la historia pueda repetirse.
En el actual contexto de los Blues existe más de una coincidencia que deja la puerta abierta a la premonición de un posible campeonato continental. Tal y como sucedió en el 2012, el Chelsea cambió de técnico a mitad de temporada, en aquel año destituyeron al entrenador Andrés Villas-Boas y en este año hicieron lo propio con Frank Lampard.
Aunado a esto, los sustitutos de aquellos dirigente cesados consiguieron 13 victorias en sus primeros 20 encuentros al frente del equipo. Roberto di Matteo lo logró luego de reemplazar a Lampard y Thomas Tuchel lleva la misma cantidad de triunfos desde que tomó las riendas de este plantel.
En 2012 el Manchester City se coronó campeón de la Premier League y en la presente campaña, los Citizens marchan como líderes del torneo ya lucen como el inminente monarca de su liga al tener una considerable ventaja sobre el resto de los participantes con una brecha de al menos 10 puntos de diferencia.
Pero los presagios no quedan sólo a nivel de la competencia local, también llegan precisamente hasta la Liga de Campeones. Con di Matteo, el Chelsea avanzó con paso firme desde los Cuartos de Final, instancia en la que eliminaron al Benfica y en la vigente campaña también dejaron en el camino a un rival portugués tras derrotar al Porto.
Justo en el duelo contra los Dragones Azules que tuvieron en esta campaña, anotaron dos ingleses: Mason Mount y Ben Chilwell, escena que también se vivió en 2012 cuando John Terry y Frank Lampard hicieron lo propio contra el Napoles.
La cereza del pastel está en las Semifinales. En esta fase, los Blues dirigidos por di Matteo enfrentaron a un español: el Barcelona, mientras que Tuchel y compañía están por encarar a otro representante de este país: el Real Madrid y de repetir los patrones de aquella temporada, el Chelsea podría prepararse para volver a vivir la máxima gloria a nivel continental.