Bayern Munich venció a un flojo Benfica en su primer partido de Liga de Campeones 2018/19, mismo que sirvió para que el cuestionado Renato Sanches ofreciera su mejor futbol ante el conjunto en el que se formó como futbolista.
La primera parte no tuvo color y el dominio total correspondió a los dirigidos por Niko Kovac. El mal arranque del Benfica lo aprovechó el delantero polaco, Robert Lewandowski, con una excelente definición.
En la grada, Sanches, que dejó el Benfica tras destacar con Portugal en la Eurocopa 2016 que ganaron los lusos y fichar por el Bayern, fue uno de los que más juego puso en el centro del campo, siempre en el inicio de las jugadas ofensivas del conjunto alemán.
Robben, Ribéry y James Rodríguez, al que pitaron los seguidores locales por su pasado en el Porto, mostraron una y otra vez su verticalidad y el descanso llegó con el 0-1.
La segunda mitad siguió el mismo guión con un Renato Sanches muy enchufado que inició una jugada en su campo, avanzó hasta tres cuartos y tras servir a James hacia la banda, remató a placer un centro del colombiano.
Sanches, que fue aplaudido por sus compatriotas, no quiso celebrar el tanto del 0-2 y pidió perdón por el gol a las gradas de las Águilas.
Al margen de la clara superioridad de los visitantes, el partido sirvió para catapultar a Sanches, que llegó hace dos temporadas al Bayern y que, tras no cuajar ante los bávaros, regresó esta campaña a Munich tras ser cedido la pasada campaña.
