Bélgica mantuvo su buena línea del Mundial de Rusia y ganó con solvencia a Escocia, que no pudo detener el vendaval del cuadro dirigido por Roberto Martínez en Hampden Park, donde ganó 0-4 con un doblete de Michy Batshuayi y goles de Romelu Lukaku y Eden Hazard.
Después del buen papel de los 'Diablos Rojos' en la Copa del Mundo con un meritorio tercer puesto tras perder en semifinales frente a Francia, volvieron al césped antes de debutar en la Liga de Naciones contra Islandia el próximo martes.
El combinado belga coció a fuego lento la victoria, dominó la pelota y casi todas las ocasiones para conseguir su primer premio en el minuto 28, cuando Lukaku empujó a la red un pase de Thorgan Hazard tras un fallo de la defensa escocesa.
Entonces, la resistencia de Escocia se derrumbó y después del descanso comenzaron a caer los goles hasta completar un resultado esperado por la calidad de Bélgica. Primero, se lució Hazard con un zurdazo desde dentro del área; después, Batshuayi remató a placer una asistencia del mismo Eden; y, de nuevo, Batshuayi, cerró la cuenta con un zapatazo desde fuera del área.
Lo hizo a falta de media hora, en la que Bélgica no quiso hacer sangre y echó el freno de mano mientras espera su debut contra Islandia en la Copa de Naciones. Su idilio con el buen futbol continúa y, si sigue así, será una de las selecciones favoritas a llevarse el torneo.
