El delantero del Bayern Munich, Sadio Mané, ha destacado por su efectividad en el ataque y aunque es considerado como un jugador de élite, el senegalés mantiene la humildad y no se asume como una ‘estrella mundial’.
"La gente dice eso de mí, pero yo no me veo para nada como una estrella mundial. No tengo ese concepto de mí. Lo único que me importa es formar parte del equipo. Lo hago todo por eso. Quiero ir al límite por mis compañeros de equipo: Marcar goles, dar asistencias y ganar partidos. Estoy aquí para dar lo mejor de mí para el Bayern Múnich", declaró para el club.
Mané demuestra sus palabras con hechos. Se estrenó de manera inmediata como goleador bávaro gracias a la anotación que hizo ante el RB Leipzig en la final de la Supercopa y precisamente busca aportar la experiencia que tiene como jugador para colaborar a que el conjunto alemán se mantenga en lo más alto.
“Cuando llegas a un gran club como el Liverpool o el Bayern siendo un jugador joven, no siempre es fácil. Todavía tienes mucho que aprender, en todos los aspectos de la vida. He vivido muchas cosas en mi carrera, me he desarrollado como persona y como jugador. Ahora quiero aportar toda mi experiencia al equipo y ayudar a fortalecerlo aún más para que todos juntos podamos alcanzar nuestros objetivos”, dijo.