En un evento amateur de MMA en Inglaterra se vivió un insólito hecho, ya que se anuló la pelea debido a un ‘error humano’; el combate lo había ganado Ollie Flint con un nocaut.
Flint lanzó una certera patada giratoria al mentón de su oponente Aaron Gray, éste cayó semidesmayado y el juez dictaminó la victoria para Ollie.
Sin embargo, momentos más tarde se anuló el combate porque el encargado del cronómetro olvidó parar el reloj y lo hizo 17 segundos después de que terminó el round, justo en la patada de Flint.