Rishi Sunak, exjefe del Tesoro, se convertirá en el próximo primer ministro de Gran Bretaña luego de ganar la contienda para ser líder del Partido Conservador el lunes. Ahora, se enfrenta a la enorme tarea de estabilizar al partido y al país en un momento de turbulencia económica y política.
Sunak será el primer líder británico no blanco, y el tercer primer ministro en este año. Sucederá a Liz Truss, quien renunció la semana pasada después de 45 días tumultuosos en el cargo, dejando una economía tambaleante y un partido conmocionado y divido.
Su única rival fue Penny Mordaunt, quien admitió su derrota y se retiró luego de que no obtuvo el apoyo necesario de 100 legisladores conservadores para mantenerse en la contienda.
En su primera declaración pública tras convertirse en líder del Partido Conservador, Sunak dijo que el país enfrenta “un profundo desafío económico” y prometió trabajar para lograr la “estabilidad y unidad”. Señaló que su “máxima prioridad” sería unir al partido y al país.
Sunak era el favorito en momentos en que el Partido Conservador buscaba algo de estabilidad en medio de enormes desafíos económicos y el reciente caos en la arena política.
SU RELACIÓN CON EL FUTBOL
No es ningún secreto la pasión de Rishi Sunak por el balompié y en específico por el Southampton, equipo de la región en la que nació.
Y es que este amor por los Saints viene directo desde su padre, pues fue él el que le inculcó la afición por el equipo rojiblanco; sobre todo desde que, en palabras del político, su padre le dio uno de los "tesoros" de mayor valor en su infancia, una tarjeta del equipo autografeada por todos los futbolistas del club, presente que jamás será olvidado por Sunak.