Gabriel Barbosa, conocido como Gabigol, ídolo del Flamengo, vuelve a ser el centro de la polémica tras organizar una fiesta que se prolongó durante 24 horas y contó con la asistencia de 80 mujeres. El evento, celebrado tras la victoria de su equipo por 6-1 ante Vasco da Gama, ha generado revuelo tanto dentro como fuera de las canchas, sumándose a una serie de controversias que han marcado recientemente la carrera del delantero.
Después del partido, Gabigol decidió tirar la casa por la ventana con una celebración que no fue todo diversión. El reconocido periodista brasileño Leo Dias reveló que la fiesta, que inició el lunes y se extendió hasta las primeras horas del martes, estuvo marcada por el consumo de alcohol y una serie de incidentes que han puesto nuevamente en entredicho la conducta del jugador. Las mujeres presentes en la fiesta fueron contratadas como "presencias VIP", aunque los detalles exactos de su participación no se han esclarecido del todo.
La situación se complicó aún más cuando la hermana de Gabigol se vio involucrada en una disputa durante la fiesta. Según uno de los testimonios, ella expulsó a una mujer que estaba manteniendo relaciones sexuales con uno de los invitados presentes, añadiendo un toque de escándalo al ya controvertido evento.
Este episodio se suma a una serie de situaciones complicadas que ha atravesado Gabigol. Recientemente, fue captado usando una camiseta del Corinthians, el histórico rival del Flamengo, lo que causó un alboroto entre los fanáticos. A pesar de que el gesto ocurrió en la privacidad de su hogar, la repercusión fue inmediata, obligando al jugador a emitir disculpas públicas. No obstante, el Flamengo decidió imponerle una multa y retirarle el emblemático dorsal número 10.
Gabigol también estuvo bajo el escrutinio público debido a una sanción de dos años por supuesta interferencia en un control antidopaje, una decisión que posteriormente fue revocada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo. Aunque retornó al Flamengo, lo hizo en medio de un halo de incertidumbre que ahora se ha visto intensificado por este nuevo escándalo.
La serie de controversias ha afectado la imagen de Gabigol, quien a sus 27 años enfrenta el desafío de gestionar las consecuencias de estos episodios que amenazan con eclipsar su carrera deportiva y su legado en el futbol brasileño. Con la dirigencia del Flamengo tomando medidas disciplinarias y la opinión pública pendiente de sus acciones, el futuro de Gabigol en el club y en el deporte está en un delicado equilibrio.