TAG Heuer, prestigiosa marca de relojes, celebró el Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1 con una espectacular velada en el emblemático barco Jacques Cartier, en el pintoresco puerto de Mónaco. Como socio oficial del evento, la firma suiza de relojes de lujo conmemoró la 80ª edición de esta prestigiosa carrera con una noche de entretenimiento inolvidable para sus invitados.
TAG Heuer se ha inspirado en Mónaco, lugar de nacimiento de su cronógrafo más emblemático, y ha sido testigo de emocionantes momentos en el automovilismo en el Principado a lo largo de los años.
Durante el evento, TAG Heuer hizo entrega de relojes excepcionales a los pilotos de Fórmula 1, Max Verstappen y Checo Pérez, en reconocimiento a sus notables logros en la competición.
Verstappen recibió una versión personalizada del último lanzamiento de la marca, el exclusivo reloj Monaco Chronograph Skeleton Dial en color azul, con detalles luminiscentes y su emblemático número "1" en rojo. Por su parte, Pérez recibió un modelo personalizado en color turquesa del Monaco Chronograph Skeleton, con detalles en negro y turquesa, que representa su resistencia y cuenta con sus iniciales y la silueta del circuito de Mónaco en el fondo de la caja.
El Gran Premio de Mónaco es un escenario icónico en el calendario de la Fórmula 1 y TAG Heuer ha sido testigo de momentos emocionantes en este circuito a lo largo de las décadas. La marca continúa su legado de excelencia en la relojería y su compromiso de inspirar y conectar con los amantes de los relojes y el automovilismo en todo el mundo.