El presidente ruso, Vladimir Putin, visitó la región de Kursk dentro del conflicto entre Ucrania, Rusia y Estados Unidos. Dentro de la reunión en un centro de control militar, el mandatario envió un mensaje claro sobre su respuesta a la propuesta de Trump para cesar el fuego en Ucrania por 30 días.
Según fuentes rusas, las tropas ucranianas en la zona están rodeadas y enfrentan dificultades para reabastecerse. Esta visita representa un hito, ya que es la primera vez que Putin acude a esta región desde la incursión ucraniana en agosto de 2024.
Además, el presidente fue visto portando un uniforme militar lo cual no es muy usual, Putin recibió un informe de Valery Gerasimov, jefe del Estado Mayor ruso, quien aseguró que las fuerzas ucranianas en Kursk están ahora cercadas.
Ante esto, Putin enfatizó que su ejército debe completar la ofensiva y eliminar la presencia ucraniana en el territorio.
Esta orden representa la postura del mandatario en respuesta a la propuesta de Trump, y parece ser que este acuerdo que ya aceptado por el presidente de Ucrania, no parece estar entre las opciones y medidas de Rusia.
La llegada de Putin en Kursk ocurre en medio de los conflictos y el apoyo de Trump a Ucrania y ahora, el mandatario ruso busca consolidar su control sobre la región antes de sentarse a negociar con ambos mandatarios.
Y esta postura toma fuerzas debido al hecho de que Putin apareciera vestido con uniforme militar enviando un mensaje de respaldo directo a sus tropas.
