¿Septiembre es el mes en el que más tiembla en México?
Septiembre es un mes históricamente significativo para la actividad sísmica en México, marcado por terremotos destructivos. El 19 de septiembre de 1985, un sismo de magnitud 8.1 devastó la Ciudad de México, causando miles de muertes y daños severos, convirtiéndose en un símbolo de la necesidad de preparación ante sismos. El 19 de septiembre de 2017, un sismo de magnitud 7.1 ocurrió en el mismo día, recordando el trauma del terremoto de 1985.
¿Septiembre es el mes que más tiembla?
A pesar de los terremotos ocurridos en 1985 y 2017, septiembre NO se considera el mes con mayor actividad sísmica en el país. Según el Servicio Sismológico Nacional (SSN), entre 1957 y 2023 se registraron un total de 27,301 sismos en septiembre, cifra que es superada por diciembre, que contabilizó 27,402 sismos. Además, noviembre y enero también presentan una notable actividad sísmica, con más de 26,000 temblores en cada uno de esos meses. En contraste, julio se destaca como el mes con la menor cantidad de sismos, con un total de 19,365.
Septiembre es un mes significativo en la memoria sísmica de México, no por ser el más activo en temblores, sino por su simbolismo y el impacto emocional de terremotos devastadores, lo que resalta la importancia de estar preparados.
¿Qué hacer durante un sismo?
Durante un sismo, es importante mantener la calma y seguir ciertos pasos para garantizar la seguridad. Se recomienda buscar refugio bajo muebles resistentes, alejarse de ventanas y objetos que puedan caer, y cubrirse la cabeza y el cuello. Si se está en un lugar público, seguir las instrucciones del personal de seguridad. Después del temblor, se debe estar atento a posibles réplicas y evaluar el entorno antes de salir.
¿Se pueden predecir los sismos?
A pesar de los avances en investigaciones y métodos para anticipar terremotos, la predicción exacta sigue siendo un reto debido a la complejidad de los procesos geológicos y la ausencia de patrones claros. Se pueden identificar áreas de riesgo y mejorar la preparación, pero la predicción precisa de sismos aún no es posible.