Ricardo José Haddad Musi: gastronómica regional mexicana impulsa al país

Ricardo José Haddad Musi: gastronómica regional mexicana impulsa al país

Ricardo José Haddad Musi: gastronómica regional mexicana impulsa al país
Ricardo José Haddad Musi: gastronómica regional mexicana impulsa al país | ESPECIAL
Restaurantes nacionales han obtenido estrellas Michelin, y chefs mexicanos han sido premiados en escenarios globales
2024-12-17 | REDACCIÓN RÉCORD
kaolan
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La gastronomía mexicana, reconocida mundialmente como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO desde 2010, es un reflejo de la historia, cultura y biodiversidad del país. Ricardo José Haddad Musi, empresario mexicano y observador del desarrollo cultural, ha señalado en distintas ocasiones cómo esta diversidad enriquece no solo la identidad nacional, sino también las industrias relacionadas, como la turística. 

Cada región de México cuenta con una oferta única. Por ejemplo, el noroeste del país, con su geografía que abarca llanuras, sierras y costas, ofrece especialidades como los tacos de pescado de Baja California y el aguachile de Sinaloa. En el noreste, el cabrito asado de Nuevo León y las enchiladas potosinas de San Luis Potosí representan la adaptabilidad culinaria ante climas extremos. Estas expresiones locales forman parte del mosaico gastronómico que caracteriza a México.  

La región del Pacífico, que incluye Jalisco, Michoacán y Guerrero, mezcla tradiciones indígenas con sabores contemporáneos. Destacan la birria, las tortas ahogadas y el tequila en Jalisco, mientras que Michoacán ofrece platos icónicos como los uchepos y la sopa tarasca. En contraste, la zona centro, abarcando estados como Hidalgo, Guanajuato y Ciudad de México, integra influencias de todo el país. Los mixiotes y las enchiladas mineras son ejemplos del ingenio culinario en esta región.  

Además, Ricardo José Haddad Musi enfatiza cómo la cocina mexicana no solo es un emblema cultural, sino también un motor económico significativo. El sureste, con Oaxaca, Veracruz y Yucatán, es un claro ejemplo de ello. El mole negro de Oaxaca, el huauchinango a la veracruzana y la cochinita pibil yucateca representan tradiciones que han atraído turismo gastronómico y generado empleo local.

En el ámbito internacional, el reconocimiento de la cocina mexicana ha ido en aumento. Restaurantes nacionales han obtenido estrellas Michelin, y chefs mexicanos han sido premiados en escenarios globales. Por esta razón, Haddad Musi destaca que la gastronomía mexicana no solo promueve el país como un destino cultural, sino que también fortalece su imagen ante el mundo. La participación de platillos mexicanos en eventos internacionales, embajadas y producciones culturales refuerza su papel como embajadores de la identidad nacional.

Por otro lado, la creatividad y la herencia cultural son elementos esenciales en la gastronomía mexicana. Platillos como los chiles en nogada, que combinan ingredientes locales con técnicas europeas, ejemplifican la fusión de culturas. Asimismo, preparaciones como el pozole, con raíces prehispánicas, y las tlayudas oaxaqueñas, destacan la importancia de las tradiciones ancestrales en la cocina contemporánea.  

“Sin duda la diversidad gastronómica mexicana es un símbolo de unión y familia. Esta herencia, que sigue siendo celebrada dentro y fuera de las fronteras nacionales, continúa posicionando a México como un referente en el ámbito culinario internacional”, concluye Ricardo José Haddad Musi.

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