Pareciera que toda la información que se puede encontrar en un museo es verídica; sin embargo, un pequeño de 10 años con síndrome de Asperge dejó en ridículo al Museo de Historia Natural de Londres, luego de que corrigiera un dato erróneo que era exhibido.
Durante su visita a la una exposición sobre dinosaurios, tema que apasiona al Charlie, éste se dio cuenta que en un cartel en el que se comparaba la estatura de los dinosaurios con la de los humanos estaba mal.
El letrero mostraba el tamaño del Oviraptor (Cazador de huevos), sin embargo, tenía la imagen de un cuadrúpedo, el Protoceratops. Tras percatarse de la equivocación, Charlie informó a su madre, la cual no le creyó en primera instancia.
El niño decidió poner 'manos a la obra' e utilizó Google para mostrar que él tenía la razón. Luego de comprobar los datos, el infante y su progenitora avisaron a las autoridades de la galería del error, las cuales acudieron con un politólogo para verificar la información.
El especialista en fósiles confirmó que el nombre y la imagen del animal no coincidía, por lo que la institución envió una carta a Charlie admitiendo su falla.