En un concierto realizado ayer en el municipio de Chihuahua, el famoso cantante Natanael Cano se encontró en medio de la controversia cuando la Subdirección de Gobernación de la Secretaría del H. Ayuntamiento de Chihuahua le aplicó una sanción de 12 mil Unidades de Medida y Actualización (UMAS), equivalente a un total de 1 millón 244 mil 880 pesos mexicanos.
La medida se tomó debido a la interpretación de contenido musical que hacía apología al delito y promovía la violencia contra la mujer, denigrándola, discriminándola, marginándola y excluyéndola.
Esta sanción se da en el contexto de la prohibición de los llamados narcocorridos en Chihuahua, establecida en el Artículo 34 del Reglamento de Justicia Cívica, así como en los artículos 208, 209 y 222 del Reglamento de Diversiones y Espectáculos para el Municipio de Chihuahua.
La Subdirección de Gobernación Municipal, bajo la dirección de Pedro Oliva, tomó medidas rápidas al levantar un acta en el lugar del evento, en conjunto con los inspectores del Departamento de Alcoholes, liderados por el ingeniero Federico Muruato. Estos inspectores supervisaron el espectáculo de principio a fin con el objetivo de mantener el orden y garantizar un desarrollo adecuado del evento.
Además de la sanción al cantante, el concierto atrajo a una asistencia de cerca de 9 mil personas. La Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) proporcionó servicio extraordinario con 90 elementos para garantizar la seguridad en el evento.
Durante la operación de seguridad, se realizaron tres detenciones, una por falta administrativa y dos por presunto fraude. Los arrestados pertenecían a una empresa de seguridad privada y estaban cobrando a los asistentes para permitirles acceder a la zona VIP.
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