Durante la semana de la moda en París, Francia, Kim Kardashian (de 35 años) hizo gala de su exhibicionismo. En esta ocasión, la socialité utilizó un revelador atuendo que dejó al descubierto sus partes íntimas; además de un marcado escote.
Con motivo del aniversario de su maquillador, Mario Dedivanovic, la modelo y varias de sus amigas acudieron al restaurante Kinu. Al salir del lugar, Kim se convirtió en blanco de los paparazzis por su ‘outfit’.
A pesar de llevar una gabardina, la estrella de televisión mostró sus prominentes atributos sin recato; para complementar su look, ocupó unas botas negras y un crucifijo a la altura de su cuello.
Sin embargo, todos se enfocaron hacia la entrepierna de la celebridad, debido a que sólo era cubierta por una delgada tira de tela.
Mientras tanto ella parecía más preocupada por su smartphone, el cual nunca soltó; además de mantener la vista agachada.
A lo largo de su estancia, en la llamada ‘Ciudad Luz’, Kim Kardashian ha dividido opiniones, entre los que critican su extravagante forma de vestir, hasta quienes la consideran un ícono de la moda.
Recordemos que a la mayoría de los eventos, la celebridad se ha presentado con vestidos transparantes.