El momento de entrega del premio a Adrien Brody pasó de la celebración a las lágrimas; se le hizo un nudo en la garganta en el escenario y dijo que era difícil disfrutar de la victoria mientras Los Ángeles ardía.
El discurso del actor en la Gran Manzana, lo calificó como un "día pesado" y admitió que fue difícil aceptar su premio al Mejor Actor por "The Brutalist" en los Premios 2025 del Círculo de Críticos de Cine de Nueva York el miércoles con tanto sufrimiento en el mundo.
Adrien Brody gets choked up during his speech at NYFCC, commending "the bravery of the first responders" currently fighting the L.A. fires. pic.twitter.com/KrUyHcnJ51
— Variety (@Variety) January 9, 2025
Por último, agradeció a los socorristas por su valentía y sacrificio, calificando su labor de digna de reconocimiento.
Los incendios no solo afectan a Palisades , sino que también se extienden por todo Los Ángeles, desde Altadena hasta Hollywood Hills, Acton y Sylmar. Con vientos brutales que avivan las llamas, los bomberos están entrando ahora en el tercer día de lucha contra las llamas.
A visibly emotional Adrien Brody talks about LA wildfires and thanks first responders in his Best Actor acceptance speech at the 90th NYFCC awards dinner.#NYFCC90 pic.twitter.com/BGM1cn7VGW
— New York Film Critics Circle (@nyfcc) January 9, 2025
Incendios en Los Ángeles han cobrado la vida de 5 personas y más de 50 mil personas desplazadas
Un incendio de rápida propagación se declaró el pasado miércoles por la noche en las colinas de Hollywood y amenazaba uno de los lugares más icónicos de Los Ángeles mientras los bomberos luchaban por controlar otros tres grandes fuegos que causaron cinco muertos, dejaron a 130 mil personas bajo órdenes de evacuación y arrasaron comunidades desde la costa del Pacífico hasta Pasadena, en el interior.
Casi 2 mil hogares, negocios y otras estructuras han quedado destruidos en esos incendios y se espera que la cifra aumente. Las cinco muertes registradas hasta ahora fueron a causa del incendio de Eaton.
El incendio de Palisades fue el más destructivo en la historia de Los Ángeles, con al menos mil estructuras quemadas.