Nada es casual
No es fruto de la casualidad que ningún equipo haya ganado en dos ocasiones consecutivas la Champions.
El Barça, actual campeón, cayó ante un Atlético intenso que fue reconocible en los 180 minutos de la eliminatoria. Los blaugranas, no. Los hombres de Luis Enrique dieron su imagen en las segundas partes de los dos encuentros, más en el del Camp Nou. En el Calderón, los futbolistas de Simeone creyeron más.
El Atlético cumplió sus dos objetivos: marcar un gol en el Camp Nou en el primer encuentro y no encajar ninguno en el segundo. Por eso estuvo hoy en el bombo de las semifinales junto al Bayern, el Real Madrid y el Manchester City, que será el más fácil de los cuatro, a priori.
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