Raúl, la historia de una foto
Salta la impactante noticia de la retirada de Raúl y me da un vuelco el corazón de periodista: Raúl González Blanco, jugador del New York Cosmos, anunció a ‘One World Sports’ que cuando termine la presente temporada de la North American Soccer League (NASL) colgará las botas. “No es un momento fácil, pero yo creo que es el momento correcto para decir adiós,” dijo Raúl.
Leyendo estas cuatro líneas recuerdo como si fuese ayer su primer gran día, el día que empezó todo. Era una tarde de sábado en la redacción de MARCA. El Real Madrid jugaba al día siguiente en el campo del Zaragoza. Un partido sin mucha historia. El entrenador era nada más y nada menos que Jorge Valdano, nuestro compañero en RÉCORD. Los redactores que habían asistido al entrenamiento de la mañana no encontraban nada noticiable en ‘un partido’ más del Real Madrid, hasta que alguien comentó que viajaría el joven Raúl con el primer equipo. Es verdad, era un chico que estaba creciendo, que evolucionaba muy positivamente, con futuro... pero nadie sabía que había llegado su momento. Fue una de esas genialidades de Valdano, siempre capaz de ver en el ADN de los jóvenes los rasgos que diferencian a un buen jugador de un gran jugador.
¿Era la noticia del partido? MARCA desde ese mismo día apostó por Raúl. Recuerdo que andaba por la redacción un fotógrafo, Luis Ángel Alonso, precisamente al autor de las fotografías que ilustraron el año pasado el reportaje de otro Raúl, de Raúl Jiménez como jugador del Atlético de Madrid. Le pedí que fuese rápido a la casa de la nueva promesa del Real Madrid. Vivía en las afueras, en un barrio modesto, en una casa modesta. Y allí estaba el fotógrafo de MARCA para inmortalizar el momento histórico de la salida de Raúl de su casa... hacia la gloria. Le despidieron sus padres con un beso de ilusión. Un sueño se estaba haciendo realidad. Al día siguiente, cuando Raúl volvió a casa su vida había cambiado.
Aquélla foto ocupó la primera página de MARCA, es la portada que acompaña hoy mi columna de RÉCORD. Sí, recuerdo como si fuese ayer cuando llamamos a Valdano para que nos permitiese hacer esa foto, cuando llegó el fotógrafo con ella a la redacción y cómo ‘dibujamos’ la portada. Ha sido un reportaje de un profundo significado para Raúl. Y voy a contar algo que nunca había contado: Hubo una época que a Raúl no le gustaba que recordásemos esa imagen, quizá porque era la evidencia de sus orígenes humildes. No, no nació rico. Ahora seguro que es distinto, seguro que al decir adiós desde Estados Unidos habrá recordado ese momento, cómo salió de casa para convertirse en uno de los grandes jugadores que ha dado el futbol mundial. Apuesto que Jorge Valdano lo recuerda tal y como lo estoy contando...
Es verdad que ‘la vida’ de los jugadores es corta y cuando el periodista ya es algo mayor ha visto el principio y el fin de muchos jugadores, pero el caso de Raúl es especial. Quizá por esa foto, por ese portada de MARCA inolvidable... El caso es que ha tomado ‘la gran decisión’ después de una trayectoria brillante y un comportamiento profesional y personal intachable. En su salida del Real Madrid no recibió el homenaje que se merecía, es verdad; pero casi mejor porque no fue una despedida y posiblemente su destino vuelva a ser el Real, su casa. Florentino Pérez le tiene reservado un puesto en la ‘fábrica’ de jugadores de donde salió el propio Raúl como un gran futbolista pero, sobre todo, con el sello de jugador del Real Madrid.
