Madrid y Barcelona no arrancan
¿Quién juega peor, el Real Madrid o el Barcelona? Es la pregunta que se hacen los aficionados en las tertulias futbolísticas a la hora del café, lo que comentan los periodistas deportivos de todos los medios... Hay unanimidad sobre el mal arranque de la temporada que han tenido los dos protagonistas de la Liga, independientemente de los resultados que están consiguiendo, de las goleadas y de estar en los puestos altos de la clasificación. La realidad es que su juego es pobre, sin brillantez, sin patrón de juego, aunque esté salpicado por la calidad individual de sus jugadores. Los cuatro goles de Neymar, en ausencia de Messi, ha sido un ejemplo.
Luis Enrique, el técnico del Barcelona, después de haberlo ganado todo en la última campaña, tiene el crédito suficiente para no impacientar a sus aficionados. Los títulos le avalan, pero también la necesaria renovación del equipo que pudiera justificar algunos momentos de desconcierto. El caso de Rafael Benítez es más delicado, porque ya le rodean todos los fantasmas de su fama de entrenador reservón y poco dado al espectáculo. Ya escribimos que se le empieza a cuestionar; es pronto, pero se lee y se escuchan comentarios en su contra que provocan que los aficionados están con la mosca detrás de la oreja. Tampoco los jugadores parecen demasiado contentos y ya ha habido más de un incendio en la caseta. Pero tranquilidad, esto no ha hecho más que empezar.
Hay datos que dibujan una realidad bien distinta en el Real Madrid. Después de disputarse ocho jornadas de Liga, sólo ha recibido dos goles en contra y, gracias a Keylor Navas, ha superado la crisis de la portería. Pocos podían imaginarse una situación así después de irse Casillas y de no llegar David de Gea. Por el contra, el Barcelona ya ha recibido once goles y parece no encontrar solución a su debilidad defensiva. Con estos números nadie podría atreverse a comparar el momento de uno y otro equipo. Es más, el Real Madrid ha marcado dieciocho goles por diecisiete del Barcelona, no ha perdido ningún partido aunque haya empatado en tres ocasiones. En futbol las estadísticas no ofrecen el diagnóstico más preciso; reflejan indicios, dan pistas, pero dos más dos no son cuatro en un terreno de juego.
El problema del Real Madrid es que todavía no se sabe a qué juega y el del Barcelona, que todavía no ha encontrado su juego. Es lo mismo pero no es igual, porque en el caso del equipo azulgrana ya sabemos de lo que es capaz. Con Benítez son todo incógnitas. Sí, es verdad, a estas alturas del artículo todavía no hemos mencionado la plaga de lesiones que están sufriendo las dos plantillas y que afectan a jugadores clave con Messi, Bale, James, Modric, Ramos, Benzema... Observando el trabajo de los médicos sería suficiente para excusar el mal juego que están ofreciendo, pero hay algo en el ambiente que no transmite confianza. Será cuestión de tiempo.
La Champions será un importante examen, especialmente para el Real en su partido frente a Ibrahimovic y Di María, líderes de PSG francés. Es de los partidos importantes, de esos que todo el mundo futbolístico estará pendiente. Será interesante ver el duelo del sueco con Sergio Ramos, que sale de una lesión pero que no quiere perderse el duelo con el “gigante”. El central blanco es de los que también necesitan mejorar su imagen y dónde mejor que en París. Barcelona, Atlético de Madrid y Valencia tienen compromisos más normales, no así el Sevilla que visita al City sin que todavía haya dado muestra de su categoría.
En realidad, ninguno de los Champions han empezado bien la temporada. El gran protagonista está siendo el Celta de Vigo. Cosas del futbol