Hirving Lozano, ausencia

Eres el mejor futbolista que posee México, se podrá pensar que Raúl Jiménez en la actualidad te está ganando la carrera, pero en condiciones futbolísticas, yo me quedo contigo.

Posees una cualidad que es sumamente preciada, no sólo en nuestra nación, sino en el planeta entero, te quitas gente de encima, eres un jugador que provoca los duelos individuales y los ganas, generas superioridad numérica y rompes esquemas por más estructurados y férreos que sean, y con ello generas espacios y zonas explotables del campo, nadie lo hace como tú, nadie, es por eso que tu valor es inigualable. 

A diferencia de aquí que la inteligencia deportiva está en proceso de perfección, quitando una tercia de clubes, los demás siguen contratando con maneras tan arcaicas que así les va.

En Europa para erogar una cantidad de dinero por algún futbolista el escrutinio es mayúsculo, la contratación no depende de un ojo clínico, depende de una cofradía de scouts, lo que determina si es válida o no. 

Por ti pagaron una cantidad brutal de dinero, lo tuyo no fue un capricho, te siguieron durante varios años, tanto en tu tierra natal como en Holanda y, obvio, en la Selección Nacional.

Decir que eras una apuesta segura resulta complejo, pero dada tu edad, tus habilidades, tu mentalidad y tu enorme talento, la falla se minimizó. Al momento podría parecer todo lo contrario, tu situación es espinosa, no hay que ser un mago para entenderlo, pero los mexicanos tenemos un ligero problema cuando de analizar a los paisanos fuera de nuestras fronteras se trata, bueno, varios problemas. 

El primero es que nos gana nuestra sentido nacionalista, tanto que en muchos casos nos convertimos en baratos patrioteros, la segunda, desconocemos la verdadera complejidad de la competencia en Europa, ver futbol en la televisión, o en cualquier medio digital no nos hace conocedores de la durísima atmósfera que se vive en las distintas regiones del Viejo Continente. Hay que vivirlos, haya que padecerlos, hay que subsistir, hay que adaptarse, hay que rebelarse a un entorno y exigencia que acá no es ni la sombra. Te contrató Carlo Ancelotti, un hombre que entiende el futbol como tú, él era un artista como tú, él hacia magia como tú, por eso pugnó por tu adquisición. 

Penosamente, o no tanto, existen cambios en el camino, llegó Genaro Gattusso, un personaje que es lo opuesto a ti, si no metes, no corres, no sudas, y no sangras, difícilmente tendrás cabida. Sin duda, hoy Hirving estás penando, pero tu aprendizaje está siendo brutal, tienes que vivir el proceso, es más, tienes que enamorarte del proceso, para subsistir y brillar, y hoy el sendero está lleno de espinas que solo te harán mejor. 

Resultan muy simpáticos nuestros análisis, hoy se venera a Raúl Jiménez, quien pasó en el ostracismo largos años, en el Atlético de Madrid fue desdeñado, y en el Benfica fue siempre un lindo suplente, nada más que eso, y después de múltiples años se consolidó, lleva un par de grandiosas temporadas y ya queremos que se vaya de ahí. Y tú que no has cumplido ni el año en una liga durísima como la italiana, en la cual insisto estás teniendo lecciones que agradecerás el resto de tu vida, ya que si eres inteligente, paciente, y te enfocas, esto que vives hoy será uno de tus mejores cimientos para el futuro mediato e inmediato, ya también queremos que te largues, la neta no entiendo nada de nada. 

Eres un grandioso futbolista, con un presente boyante, pero con un futuro inmensamente mejor, eres el mejor futbolista que tiene el país, el más completo, serás el encargado de comandar a la Selección Nacional en años venideros, sé perfectamente que unas piedras en el camino no te sacarán de tu misión.