Sin ganar un solo partido en Selección Nacional se convirtió en el “Bien Amado” entrenador. Hoy será la última vez que lo veamos ahí, con esta doble personalidad que ha manejado, porque cuando está en su club es radicalmente opuesto a lo que mostró en su breve paso en la Selección. Se extrañó al técnico con actitudes militarizadas y se convirtió en un comparsa más de los futbolistas, estos mismos personajes que han tomado el control de la Selección Mexicana y que tres de ellos ya hasta se fueron del equipo.
DFP tag: DN_Intext_Center_BTF_1
Claro que Tuca Ferretti tiene razón en haber actuado de esta forma, al final no es su responsabilidad y la imagen que entregó como responsable de la Selección fue extraordinaria, es más, ganó muchos adeptos que antes no lo toleraban.
Un zapatazo con gran decisión de Paul Aguilar cambió mucho el panorama de la actualidad de un equipo que si pretende distinguirse, tener mejor nivel competitivo y llegar a cumplir el objetivo del quinto partido en Rusia 2018, deben cambiar rotundamente su actitud, sus formas y regresar al único “legado” que dejó Tuca Ferretti aunque fuera solamente por quince minutos: hambre de ganar, no sentirse superiores al rival antes de jugar los partidos, tomar su profesión enserio y ser humildes.
Mientras Tuca Ferretti se convirtió en el mejor publirrelacionista de la Femexfut, desde el escritorio se han encargado de seguir cometiendo errores garrafales. El proceso de elección de Juan Carlos Osorio fue lleno de enredos, intrigas innecesarias y verdades a medias. Nunca fueron claros.
Más del ridículo que hicieron cuando la directiva del Sao Paulo y el propio colombiano informaron que ya era entrenador nacional y se seguía negando en México, hubo otros factores que evidenciaron el pésimo manejo en el tema.
En Pasadena todos nos preguntamos: ¿A quién se le ocurrió aceptar que Osorio apareciera en un palco junto al de los periodistas, e imaginar que nadie intentaría tomarle una foto o sacarle una declaración? Este penoso episodio no estaba contemplado, ya que en el palco F21 no existía respaldo de seguridad y tuvo que ser Diego Suinaga, miembro del staff de comercialización de la Femexfut, quien intentó poner un alto a los periodistas. Para su mala suerte, desde el palco de prensa se veía perfectamente al colombiano, ya que la división es únicamente por un vidrio.
¿Por qué lo escondieron tanto? Obsesiva la Femexfut en que aún no estaba firmado, aunque aparecía ya como miembro de esta organización. En el aeropuerto de Los Angeles volvió a aparecer y se pudo platicar en él aunque sólo emitió monosílabos. Para la mala fortuna de quien lo intentaba esconder, Osorio compartió la primera clase de Aeroméxico con el legendario periodista José Ramón Fernández. Cuando salió de migración se dio cuenta que no nada más venía en ese avión el citado periodista, sino que habíamos muchos más que pudimos observarlo. Pero lo que detonó el absurdo es que a la salida de la sala internacional lo esperaban decenas de medios y ante la presión de los reporteros tuvo que repetir monosílabos y dar una auténtica declaración “banquetera”.
El futbol mexicano no está para este tipo de papelazo, están más preocupados por las críticas que por hacer las funciones que les corresponden. El Tuca Ferretti entregó el pase a la Confederaciones, tal vez lo mejor hubiera sido que se despidiera ahí, en pleno júbilo por ganarle a Estados Unidos y dejar que ya fuera el verdadero entrenador de la Selección quien debutara en contra de Panamá, al final sería el único partido de preparación rumbo a la Eliminatoria. ¿Y saben qué?, esta noche pasará lo mismo: los medios estarán más pendientes de lo que haga Osorio que en el partido “molero”.