Christian Martinoli
@martinolimx
Uno de los mejores cronistas deportivos en México, trabaja para TV Azteca y ha colaborado con RÉCORD desde 2010.
Doctor Hernández o Míster Bauer
González Iñárritu quiere transformar la película de terror en lo que venían convirtiéndose las Águilas del América en una de superhéroes, o por lo menos en una donde el protagonista se lleve los créditos principales.
Cual Lobo de Wall Street, Héctor aterrizó en el Nido con toda la experiencia a cuestas dentro del lobbying del futbol mexicano y con la llegada directa a la cúpula del cuadro de Coapa, sin intermediarios ni trabas, el hermano del cineasta tiene línea recta para conversar con el propietario del club, con todo lo que eso representa y también compromete.
Por eso no podía quedar mal de entrada, y como en los mejores tiempos, volvieron a abrir la cartera para traer a dos importantes jugadores que en la Liga MX pueden hacer diferencia suficiente en las dos áreas.
Un central importante para nuestro medio como lo es Néstor Araujo, elemento que sorprendió a todos volviendo al futbol local cuando en el Celta de Vigo su presencia era constante, sin embargo, parece que los números cerraban mejor por estos lares. Y la estelar vuelta de Jonathan Rodríguez, un jugador que en México ha hecho diferencia cada vez que se lo propone, y aunque viene de meses inciertos y con cierta falta de ritmo, su calidad es tan probada que en el peor de los casos, para el mes de septiembre se vislumbra que podría estar al cien por ciento llenando sus estadísticas habituales como siempre lo hizo.
Lo de Jürgen Damm queda como incógnita, igual que la mayoría de su trayectoria; un futbolista con condiciones poco habituales en la creación y desequilibrio, pero que no quiere dar el paso consagratorio para dejar de ser una eterna promesa de nuestro futbol.
Ahora le dan una nueva oportunidad dentro del equipo que tiene detrás una maquinaria publicitaria que es brutal, misma que podría endiosarlo en cinco minutos o hundirlo en menos tiempo. Desafío vital para un jugador que ya no tiene tiempo que perder dentro del campo de juego, por más que fuera del mismo parezca salvado.
Tras la triste gestión comandada por Santiago Baños, la gente del América, desesperada, ve en González Iñárritu una especie de salvador, veremos cómo le va con tanta presión encima al buen 'cineasta', no vaya a ser que en lugar de transformarse el nuevo Panchito Hernández se convierta en la reencarnación de Michel Bauer.