En este debate eterno sobre si es posible tener una propuesta ofensiva y conseguir el resultado positivo habrá que analizar está versión de Cruz Azul, dirigida por Martín Anselmi, porque podemos encontrar una buena respuesta.
Haremos este ejercicio, poner números, datos fríos y los traducimos al lenguaje futbolístico, así tendremos un análisis basado en evidencias tangibles, evitando los supuestos.
Información confirma la vocación ofensiva de La Máquina
Es la mejor delantera del torneo, tiene 23 goles anotados. Su permanente búsqueda del arco rival se confirma, ya que ha marcado 10 goles de local y 13 de visitante, no le importa el escenario el equipo mantiene la postura ofensiva.
En los tiros a gol se repite este dato al tener 131 disparos en 10 partidos, 59 en casa y 72 en patio ajeno. Además, su propuesta la mantiene durante todo el partido. Cuando más anota es del minuto 30 de cada tiempo hacia el final, en la primera mitad ha logrado ocho y en la segunda siete, todos los partidos los cierra marcando goles.
Este dato lo respalda la cantidad de disparos a gol que tiene la misma tendencia con 26 al cierre de la primera mitad y 27 en el segundo cierre. Otro dato que confirma su obsesión agresiva es la cantidad de jugadores distintos que han anotado, hasta el momento lo han hecho ocho integrantes del equipo.
De las 23 anotaciones, nueve son de los centrodelanteros, seis de los volantes ofensivos, tres de la posición de contenciones y cuatro de un carrilero, bastantes jugadores que los rivales tienen que cuidar de forma permanente.
Propuesta bien ejecutada
Tiene un 86% de pases acertados, un número que no es espectacular, pero que es bueno a la velocidad que desplaza el balón, al imprimir mayor velocidad el rango de error aumenta de forma considerable. Suma 4134 pases en la campaña, cuando la media de la Liga MX es de 3361, esta un 23% por encima del promedio.
El comportamiento con el esférico nos llama la atención en tres etapas del juego, al arranque, al final del primer tiempo y al cierre del partido es cuando más tiempo juega el balón, le alcanza para abrir bien el encuentro y cerrar dominante los dos tiempos.
Además, en nueve juegos se ha colocado arriba en el marcador, ganó ocho y solo perdió uno.
Y hay que analizar las estadísticas del sector bajo, porque no existe un ben ataque sin una buena defensa. Únicamente ha recibido ochos goles, lo destacado es que siete fueron en el primer tiempo y solo uno en la segunda mitad, baja la cortina de forma importante para el cierre del juego.
La semana pasada ante Pachuca vivió su por momento en el torneo, tuvo 30 minutos muy malos, decidió hacer experimentos en la línea de los tres centrales, fue un intento fallido, dejó a Piovi en la banda, ante el desastre del arranque del juego, lo metió, ajustó al equipo y ahí terminó ganado 4-2 a los Tuzos.
La versión de La Máquina propuesta por Anselmi es muy agradable a la vista, contundente ante la portería rival, cerrada en su propio marco y con un alto nivel de efectividad en los puntos conseguidos.
Está confirmado: Jugar bien y ganar es posible.