El 23 de octubre de 1981 el deporte mexicano vivió uno de sus episodios más grandes en toda la historia. Fernando Valenzuela, un serpentinero novato originario de Etchohuaquila, Sonora, se fajó en el escenario más grande de beisbol profesional: La Serie Mundial. Ante los Yankees, el joven que estaba por cumplir los 22 años se hizo grande en la lomita.
Aquella imagen de Tommy Lasorda corriendo a abrazar al lanzador mexicano marcó el inicio de la llamada ‘Fernandomanía’, una época de oro para el deporte nacional. Todos los juegos del sonorense eran transmitidos en televisión abierta y el país entero se detenía para ver al zurdo en acción. Los Dodgers entonces generaron un gran arraigo en nuestro país, lo que marcó una gran relación que persiste hasta nuestros días.
Los Angeles concentra una gran población latina dentro de los Estados Unidos. México registra el 60 por ciento de la población latinoamericana en el vecino país del norte, según cifras de la BBC en 2019. La urbe californiana, sobre todo en las afueras, alberga a muchos compatriotas que voltearon a ver el beisbol gracias a Fernando Valenzuela.
Sin embargo, el lanzador no ha sido el único mexicano presente en la organización. Otros grandes peloteros han portado la camisola de los Dodgers. Adrian González y Alex Verdugo tuvieron breves pasos con el conjunto californiano, aún así lograron mostrar su calidad con el bat. Para esta Serie Mundial Víctor González y Julio Urías saltaron a la lomita para darle a los Dodgers su primer campeonato en 32 años.