Los Warriors de Golden State, con con el base Stephen Curry como protagonista, dieron una exhibición de buen juego ante los Pelicanos de Nueva Orleans (111-95), en la jornada inaugural de la NBA y en la que recibieron el anillo de campeones.
Curry brilló de manera especial al anotar 40 puntos, incluidos 24 en el primer cuarto.
El Jugador Más Valioso (MVP) de la liga y de las pasadas Finales de la NBA fue una auténtica pesadilla a la hora de tirar a canasta desde cualquier posición del campo, y por décima vez en su carrera llegó a los 40 tantos.
Hasta ahora, nadie en la historia de la NBA había conseguido tantos puntos en un partido inaugural. Curry lo hizo después de anotar 14 de 26 tiros de campo, incluidos 5 de 12 triples, y estuvo perfecto 7-7 desde la línea de personal.
Fue la primera victoria de los Warriors bajo la dirección del entrenador interino, el novato Luke Walton, que ocupa el puesto de Steve Kerr, quien se encuentra de baja mientras se recupera de una doble operación de espalda a que fue sometido durante el pasado verano.
Por su parte, el alero LeBron James comenzó la temporada con la derrota de su equipo, los Cavaliers de Cleveland, ante los Bulls de Chicago.
Los ala-pivots, Pau Gasol y Nikola Mirotic, fueron decisivos en el triunfo de los Bulls que se impusieron por 97-95, en el duelo revancha de las pasadas Semifinales de la Conferencia Este.
Gasol, monumental en su labor defensiva, que le fue encomendada por el nuevo entrenador de los Bulls, Fred Hoiberg, como número cinco titular, acompañado de Mirotic, en el poste bajo, respondió de manera espectacular en el último minuto y medio de partido cuando puso dos tapones, uno de ellos a James, que impidieron a los Cavaliers lograr el empate y forzar la prórroga.
Mirotic, que jugó 25 minutos, anotó 19 puntos, incluidos 11 en el primer cuarto, y encabezó una lista de cinco jugadores de los Bulls que tuvieron números de dos dígitos.
El escolta Jimmy Butler también fue decisivo en el juego de equipo al conseguir 17 puntos, cinco rebotes, dos asistencias y dos recuperaciones de balón.
James volvió a ser el líder del ataque de los Cavaliers con un doble-doble de 25 puntos, 10 rebotes y cinco asistencias.
La sorpresa de esta jornada inaugural fue la victoria a domicilio que consiguieron los renovados Pistones de Detroit (94-106) frente a los Halcones de Atlanta, el equipo que la pasada temporada logró marca de 60-22.
El poder del juego interior y el acierto encestador del escolta Kentavious Caldwell-Pope, que anotó 21 puntos, fueron claves en el triunfo de los Pistones, que no ganaban un partido inaugural desde la temporada del 2008.
El pívot Andre Drummond lideró el juego interior con un doble-doble de 18 puntos, 19 rebotes, mientras que el ala-pívot Marcus Morris logró 18 tantos y capturó 10 balones bajo los aros.
El base alemán Dennis Schroder se convirtió en el máximo encestador de los Halcones al salir de sexto jugador y aportar 20 puntos, mientras que el ala-pívot Paul Millsap consiguió 19 y ocho rebotes.