A evitar una nueva noche de sufrimiento. Todos tenemos una pesadilla constante, una bestia habitual, que cada que se nos pone por delante frena nuestros deseos, y América no es la excepción, para las Águilas jugar contra Pachuca en instancia de Liguilla significa sufrir y en la mayoría de los casos agarrar sus cosas y volver a casa con las manos vacías.
Sin embargo, el equipo tiene la oportunidad de hacerle frente, encarar con jerarquía la serie y conseguir su boleto a la gran Final.
Se avecina un nuevo reto para Fernando Ortíz y sus pupilos, repetir lo hecho por el equipo de Miguel Herrera en 2012 y eliminar a los Tuzos, la única hasta ahora, ya que de las 5 veces que se han visto las caras en estas instancias, los de la Bella Airosa dominan con 4 series ganadas, incluida la Final del Torneo Clausura 2007 en la cual Guillermo Ochoa también era el guardameta del equipo.
Hasta su antecesor Santiago Solari fue víctima del Pachuca hace un año. Si bien en el marcador igualaron a cinco goles, fueron los Tuzos los que avanzaron a la siguiente ronda por la regla del gol de visitante, mandando de vacaciones rápido a los de Coapa en el torneo en el cual terminaron siendo el líder general.
Y es justo ese detalle el que pone al América con la posibilidad de pagarle con la misma moneda, pues como se sabe Pachuca finalizó en primer lugar de la Fase Regular por ello tendrá la ventaja de cerrar cada serie que dispute en su estadio, hecho que para Águilas es un poco irrelevante tomando en cuenta que en todas las plazas el americanismo se hace presente.