El suizo Joseph Blatter mostró su decepción y disconformidad con el Comité de Ética de la FIFA, que lo suspendió provisionalmente durante 90 días como presidente sin haberlo escuchado, y espera la oportunidad de demostrar que no ha cometido irregularidad alguna.
En un comunicado emitido por sus abogados, Blatter se muestra decepcionado porque, a su juicio, el Comité de Ética no siguió los Códigos de Ética y Disciplina de la FIFA, "que ofrecen una oportunidad de ser escuchado", y basa su decisión "en un malentendido" de las acciones del Fiscal General de Suiza, "que abrieron una investigación pero ningún cargo contra el presidente".
"De hecho, los fiscales estarán obligados por ley a descartar el caso si sus investigaciones, de apenas dos semanas, no establecen suficientes evidencias. El presidente Blatter confía en tener la oportunidad de presentar evidencias para demostrar que no incurrió en ningún mal comportamiento, criminal ni de otro tipo", concluye.
La reacción de Blatter se produce después de que la FIFA confirmara que su Comité de Ética acordó suspender provisionalmente durante 90 días al presidente Joseph Blatter, al vicepresidente y máximo mandatario de la UEFA, Michel Platini; y al secretario general Jerome Valcke, que fue destituido el 17 de septiembre.
La duración de las sanciones, impuestas dentro de la investigación que se lleva a cabo dentro del máximo organismo futbolístico mundial por presunta corrupción, puede ampliarse por un periodo adicional no superior a 45 días.
Entre los cargos contra Blatter, de 79 años, figura "un pago desleal" de dos millones de francos (unos dos millones de euros) a Platini "en perjuicio de la FIFA".
El dinero estaba destinado "supuestamente" a obras efectuadas entre 1999 y 2002, aunque el pago fue realizado en 2011, especificó la Fiscalía.